sábado, febrero 11, 2006

El Poder de la Iglesia...


Meditando en el libro de los Hechos (ooooohmmm...), dí con una combinación de palabras que en nuestra iglesia no estamos muy acostumbrados a usar: "Espíritu Santo" y "Poder" (No es que no las hubiera leído antes pero ahora lo ví de otra manera).

Cuando se combinan las palabras “poder” y “Espíritu Santo” los bautristes nos persignamos. Acusamos de “bauticostes” o “pentebautista” a quien las usa en un solo enunciado... Sin embargo Jesús mismo fue quien pronunció y relacionó estas palabras: “Recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo” (Como relata Lucas en el libro de los Hechos).

El libro de “Los Hechos de los apóstoles” nos habla del principio de la iglesia; el problema al estudiarlo, es que “se nos ha dicho” que no podemos acercarnos a este libro para hacer “doctrina”. No pretendo hacer doctrina (ese trabajo se lo dejo a los teologos).

Mi deseo es descubrir características y principios de la iglesia para valorar nuestra forma de “hacer iglesia”; no para volver sobre nuestros pasos hasta la “iglesia primitiva”, sino para interpretarla y hacerla pertinente, oportuna y eficaz para nuestra generación.

Si decimos ser una "iglesia bíblica" (por supuesto todas dicen serlo), debemos acercarnos a la Biblia (sin nuestras gafas de bautriste), para descubrir en nuestro fundamento original lo que es la iglesia y el PODER que le impulsa. Jesucristo vivió y enseñó guiado por el Espíritu Santo; si deseamos continuar su ministerio debemos ser impulsados por la persona que él dejó en su lugar: El Espíritu Santo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

!Bravo!!!! aplausos: plas plas plas, y demás muestras de emoción de un espíritu primitivo, poco Santo pero que confía plenamente en la transformacíon a travès del Poder del Espíritu Santo!
Con gratitud por los ladridos que me pastorean, fraternalmente:
La ovejita negra.